El lenguaje es una habilidad muy importante en la vida de nuestros peques y su desarrollo tiene un impacto significativo en el día a día, es un proceso complejo que a veces genera preocupación en los padres. Dos términos que se escuchan a menudo son “retraso simple del lenguaje (RSL)” y “trastorno del desarrollo del lenguaje (TDL)”, aunque parecen iguales tienen importantes diferencias que son clave, pero, ¿cómo podemos diferenciarlos?
El retraso simple del lenguaje
se manifiesta mediante un desfase cronológico en la adquisición del mismo, siendo esta disfunción de tipo evolutivo y temporal. Es decir, el niño adquiere el lenguaje más tarde que otros de su misma edad, aproximadamente entre un año, o año y medio más tarde. Observamos que:
– Afecta principalmente al área fonológica y sintáctica
– El nivel de vocabulario es más bajo
– Nunca repercute en el lenguaje escrito.
El trastorno del desarrollo del lenguaje
observamos que las dificultades afectan tanto a la adquisición como al uso del lenguaje son más persistentes y complejas y no se desarrollan de la forma clásica. Nos encontramos con:
– Problemas de comprensión y/o expresión del lenguaje
– Afectación tanto en el área fonológica (reconocer y usar los sonidos del lenguaje hablado), semántica, (escaso vocabulario, asociar significado- significante, categorizar…), morfosintáctica (conjugar verbos, reglas de concordancia…) y/o pragmática (comunicar y expresar deseos, interpretar la intencionalidad del emisor…).
– No tenemos por qué encontrar alteraciones en todas las áreas, pero la morfosintáctica siempre lo está y es tomado como un criterio clave para el diagnóstico.
– Todo lo anterior conlleva que se puedan encontrar dificultades en las relaciones sociales.
Es importante destacar que la línea que separa el retraso simple del lenguaje del trastorno del desarrollo del lenguaje, no es clara, si las dificultades son compensadas mediante estimulación, aunque la evolución sea más lenta podrán equipararse antes de los 6 años, de no ser así, debemos valorar qué es lo que ocurre, ya que podríamos hablar de un trastorno del desarrollo del lenguaje, una vez descartadas otras sintomatologías. Lo más importante es detectar estas dificultades a tiempo e intervenir cuanto antes a la mínima sospecha, no esperar a confirmar el diagnóstico.
Ante cualquier duda, es importante contactar con un logopeda ya que son los especialistas en el lenguaje y su adquisición. En Proyecta contamos con un equipo especializado. ¡No dudes en consultarnos lo que necesites!